LA GRUTA - EL OJO DE LUMIOL
La antorchas y lámparas de aceite iluminaban aquel lugar proporcionando un ambiente cálido y sensual, los géiseres y aguas termales cubrían las rocas y muros de cristales con millones de gotitas de vapor. El agua alcanzando una temperatura de 23 º y con alto contenido mineral adquiría unos bellos tonos azules y verdosos...
Rheiki no tardó en aparecer. Desde su posición, en un plano inferior, la figura del fauno le resultó al omega espectacularmente atractiva y masculina. El macho cabrío se desprendió de su taparrabos y fue caminando hasta el lugar donde le esperaba su amado. Sus pesadas y voluminosas bolas se balanceaban y entrechocaban contra los peludos y fuertes muslos mientras que su verga engrosada pero aún en estado latente, entró en potente erección a modo de manecilla de un reloj de sol, ya que en cuanto se acercó a Unai pronto señaló las doce en punto. Se comieron a besos. Al gigante le gustaba morder los carnosos labios del adolescente hasta hacerle gemir de dolor, a continuación, su saliva a modo de bálsamo se los curaba para engullirlos, para finalmente, enroscar sus lenguas.
No hay nada más hermoso y seductor que la diversidad, el contraste, la diferencia... contemplar aquellos cuerpos con pieles de tonalidad tan distinta y morfología tan dispar, resultaba realmente erótico y electrizante. Los pezones del muchacho emergieron a la superficie, el agua cálida contribuía a que aquellas dos rosadas areolas aumentasen de grosor y diámetro. Rheiki los mordisqueó suavemente para estimular al omega y prepararlo para la cópula. El macho alfa estaba hambriento y con deseos de poseer a su travieso cabrito que no cesaba de chapotear y juguetear en el agua.
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CORAZÓN DEL ÁRBOL
Belver y Uriel, dos hermanos gemelos idénticos, llevaban casi dos días conociéndose después de haber estado separados veintiún años desde el momento en que nacieron. Aclararon muchas dudas y temas en común, discutieron y dialogaron durante horas hasta que entre ellos - si no un cariño sincero y sólido - sí se estableció una cierta amistad y camaradería. Aquella ciudad subterránea ofrecía a los dos jóvenes muchos lugares de diversión y asueto. Tras visitar algunas tabernas y flirtear con algunas muchachas, Belver convenció a su hermano para visitar el mejor prostíbulo de la villa. Excavado en la roca tenía varios túneles y habitaciones donde podían satisfacerse los deseos y pasiones más insólitas y extremas. Pagaron los servicios de una joven muchacha que gozaba de cierta fama en el prostíbulo en relación a cómo complacer a los clientes.. Fue el elfo quien se la recomendó a los hermanos, y fue también el propio elfo quien eligió la estancia donde los dos jóvenes pudiesen follar cómodamente y en privacidad con la hermosa prostituta. El suelo estaba cubierto con varias pieles de oso polar, tigres y leopardos. Velas aromáticas flotando sobre cuencos de vidrio y flores de encendidos pétalos, junto con el incienso importado de Oriente, invitaban a la sensualidad y la lujuria. Por arte de magia, la fina pared de alabastro situada al fondo de la estancia, dejó entrever lo que sucedía "al otro lado". Aunque estaban en coordenadas geográficas diferentes y a cientos de leguas de la escena que estaban presenciando, por algún extraño sortilegio, los hermanos gemelos pudieron ver relativamente cerca a Rheiki y Unai amándose en la piscina de Ojo De Lumiol.
- ¿Quienes son éstos? no los he visto en mi vida - exclamó Uriel.
- No los conoces, pero aunque no lo creas, están relacionados con tu vida y tu destino. En especial, el muchacho pelirrojo... lleva medio caudal de tu misma sangre. Contestó Belver
- ¿Este es el chaval de quien me hablaste, el hijo que padre tuvo con la nórdica?
Belver asintió con la cabeza.
- Por Zeus todopoderoso, pero si es un niño todavía! ¿Cómo han permitido entregárselo a otro hombre? ¿Qué edad tiene?
- Hace apenas unas semanas que cumplió los diecisiete, y no lo entregaron, fue el puto fauno quien lo raptó y llevó consigo al bosque.
- Es realmente hermoso ¿Se parece a ella?
- Sí, bastante. Es igual de ardiente y sensual que su puta madre. Ambos llevan el demonio quemándoles la sangre.
- Oh, vamos Belver.. no es necesario que los ofendas e insultes.
- Ah no? abandonaron nuestra casa y dejaron a nuestro padre triste, enfermo y lleno de ira al conocer la noticia. Esa zorra nórdica es una adúltera que cada noche folla con todos los machos de la manada. He sido testigo de ello con mis propios ojos! ¿de verdad quieres que tu hermano crezca y se eduque en compañía de esos animales depravados?
Uriel no le quitaba la vista a Unai... el omega comenzaba a despertar una ternura y un amor extraño e intenso en este nuevo hermanastro que acababa de conocerle tras el cristal de alabastro. Sin embargo, Uriel giró el cuerpo y se colocó de espaldas a la pared cuando vio que el fauno de modo lascivo acercó las nalgas del sumiso a sus labios. Era superior a sus fuerzas para el gemelo ver aquello, pero apartar la vista no le libró de alcanzar una potente erección.
- Eh tú... -dijo Belver dirigiéndose a la muchacha - ¿a qué esperas para chuparnos la polla a mi hermano y a mí? te hemos pagado para que nos complazcas, no para que pierdas el tiempo.
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LA GRUTA - EL OJO DE LUMIOL
Rheiki levantando al omega con sus fuertes brazos lo colocó en el borde de la poza de agua termal y le hizo tumbarse abriéndole las piernas. El fauno pasó la lengua por el suave cuerpo del muchacho recorriendo desde los puntiagudos y tiernos pezones, deteniéndose unos segundos en el ombligo, hasta acceder a la entrepierna del sumiso que comenzaba a gemir placenteramente. la verga de Unai al igual que el resto de su piel era suave y sonrosada, voluminosa y húmeda con un glande recubierto de piel que al igual que un termómetro se volvía de un rojo encarnado con la excitación. Rheiki no pudo resistir la tentación de saborear aquel capullo de rosa que mantenía apretados sus suaves pétalos hasta que sus labios lo desenfundaron de la piel que lo cubría. Los testículos lampiños del omega , redondos y pegados al escroto crecieron de tamaño y se estremecieron de gusto.
- Mmmmmmm, Rheiki me matas....
El vello que cubría el cuerpo del omega era rubio y suave, una ligera pelusa apenas perceptible a la vista y al tacto. Una sombra pelirroja coronaba el pubis del adolescente como una llama en la nieve. Rheiki continuó su recorrido con al lengua hasta hundir su nariz entre los dos hemisferios que formaban aquellas pequeñas y carnosas nalgas. Unai empezó a gritar y a suplicar cuando la lengua del fauno empezó a trabajarle su estrecho agujero: En primer lugar, le introdujo un dedo, luego dos y por último tres... para comprobar la temperatura de aquel hermoso culo. El muchacho estaba caliente y receptivo para su macho. Es de señalar, que los machos omegas sufren cambios en su organismos cuando entran en contacto directo con un alfa: su olor y almizcle se vuelve mucho más suave y aromático; la marca en el cuello funciona como un reloj biológico puesto que son unas glándulas muy sensibles al contacto del macho, a su feroz mordedura... y el esperma baja en densidad y espesor transformándose en un fluido dulce y semitransparente parecido al precum. El omega que está en sumisión voluntaria, cede su masculinidad al alfa, entra en celo al inhalar el poderoso almizcle masculino, le reconoce como macho dominante y está orgulloso de ceder todo el protagonismo a la verga del alfa dominante, el único falo que lleva el control y el único que puede inseminar por propio derecho natural y jerárquico. También cabe decir, que esta metamorfosis que experimenta omega acentúa aún más la virilidad del alfa, aumenta su poder y seguridad en sí mismo al comprobar que puede someter y dominar a otro macho hasta hacerlo de su única propiedad, funciona como una potente droga erótica. La ardiente y apasionada sumisión que le ofrece el omega, para el alfa constituye uno de los mayores afrodisíacos. Despierta en él sus instintos más primarios y más salvajes... sabe que puede incluso devorarlo si le viene en gana.
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CORAZÓN DEL ÁRBOL
- Hermano - dijo Belver a su gemelo - observa esas redondas y apretadas nalgas ¿no son realmente hermosas? ese rosado agujerito que ya empieza a lubricar por sí mismo porque la naturaleza de los omegas hace que se humedezcan y disfruten de intensos orgasmos interiores sin necesidad de tocarse. El cuerpo de Unai está perfectamente diseñado para complacer y satisfacer en todos los aspectos a otro hombre.
- Calla sobre esas palabras que locura inspiran! ¿sabes lo que estás diciendo? el chaval es nuestro hermano... semejante pecado enfurecería a los dioses.
- jajajjajaja deberías haber escuchado lo que dijo el oráculo: "el número tres perfecto es"... créeme, hermanito, estás completamente equivocado: fueron los propios dioses quienes crearon y propiciaron la unión de las tres sangres. De lo contrario, nuestro linaje no podrá tener descendencia y tanto nuestra familia como nuestro escudo de armas perderán todo el poder y hegemonía sobre estas tierras.
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- No voy a serle infiel a mi esposa ni tampoco hacerle daño a ese pobre muchacho.
- ¿Daño? ¿has dicho... "daño? jajjajajja
- Sí, tanto físico como moral.
- Ah, hermanito querido... veo que ya has empezado a pensar e imaginar "ciertas cosas" - Belver agarró a su gemelo del cuello y le empujó contra la pared de vidrio - qué carajo de daño ni orcos en vinagre! observa cómo es el propio Unai quien coge la verga del puto cabrón con su mano para metérsela dentro. Mira cómo es capaz de dilatar magistralmente ese precioso culito hasta conseguir empalarse en esa verga que tiene el tamaño de las dos nuestras juntas. Podríamos penetrarle los dos al mismo tiempo sin problema tras una buena dilatación. ¡Claro que está gritando... pero de puro placer! ¿acaso no lo ves con tus propios ojos? Contempla cómo vibran y palpitan esos pezones aún sin leche.. uno para ti y otro para mi, hermanito.... y más tarde, cada uno de esos pezones amamantarán a nuestros dos hijos gemelos! Vamos.. contéstame: dirías que el muchacho está sufriendo? ¡no me jodas! ese chaval es caliente como el infierno! una buena puta en la cama, pero fuerte y masculino como para imponer su voluntad cuando es necesario. El muchacho tiene raza, tiene clase y suficiente orgullo y dignidad para ser de los nuestros.
Uriel se mantuvo en silencio.
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LA GRUTA - EL OJO DE LUMIOL
Ahora el turno de Unai para hacerle una buena mamada a su alfa. Él se expresaría de este modo:
¿Qué cómo le como la polla a mi macho alpha? pues exactamente como a él le gusta y le hace disfrutar más, exactamente como él quiere y me lo ordena. Día a día me esfuerzo en complacerle: empiezo salivando el cetro de mi dios con lengua ágil y suave para para rodear el glande y desvestirlo de la piel que lo recubre para luego aplastarlo delicadamente contra mi paladar. Necesito demostrarle mi devoción y admiración, lo hambriento que estoy de él mientras su polla se va endureciendo y conquistando mi cavidad bucal. Tengo la dentadura en perfecto estado acudiendo a mis citas regulares con mi odontólogo y llevando una higiene exhaustiva: después de cepillarme los dientes utlilizo el raspador lingual para que ésta permanezca siempre limpia, fresca, y muy suave. Lo mismo que mi saliva. Mi alpha agradece mi entrega y devoción por él… cuando tengo su polla dentro de mi boca, acanalo la lengua para envolver su capullo en ella con el fin de acariciarlo y lamerlo con delicadeza. Entonces, tras bajarle la piel del prepucio con los labios, siento el grosor, la dureza de su cipote curvándose con toda su potencia en un ángulo superior a 90º y empiezo a sentir el latido de sus venas ¡no tengo palabras para describir la emoción de ese momento! desde sus huevos hasta la punta de su polla la sangre palpita y circula por el cuerpo esponjoso de su verga, ¡mi macho se está comunicando conmigo a través de su masculinidad! y yo debo saber descifrar el lenguaje de su deseo. Con su polla dentro de mi boca no necesita hablarme porque yo sé exactamente lo que le gusta, qué ritmo aplicar a mi mamada, qué significa cada vibración y movimiento de su verga. Mientras escribo esto no imagináis como me tiemblan los dedos sobre el teclado, nadie que no sea un puto esclavo sumiso como yo puede llegar a comprender la emoción que siento cuando sirvo y complazco a mi macho Alpha. Incluso lo escribo con (ph) y en mayúsculas por el amor e inmenso respeto que siento por él.
Con la punta de la lengua hago movimientos giratorios sobre su capullo desnudo para después abrirle el agujerito del meato y saborear su líquido preseminal. Se trata de una succión instintiva y hambrienta como la de un cachorro que suplica leche a su amo, el puto mamífero en busca desesperada de su alimento.
Ese esfuerzo de succión me embriaga, calma mi ansiedad y relaja mi mandíbula, incluso me adormece… me olvido hasta de respirar con tal que él siga dentro de mí. Lo único que deseo es que mi macho hunda por completo su espada en mi garganta… me concentro en abrir la mandíbula y separar las amígdalas al máximo, aflojar los músculos de mi garganta para permitir que toda su polla penetre y reciba por todo la superficie de su cipote una caricia cálida y húmeda. Por amor a él, porque le amo desesperadamente, no se me ocurriría atragantarme cuando me folla la boca porque he aprendido (tras ensayar con un dildo de su talla) a respirar, a controlar las arcadas y la asfixia. Eso sí, no puedo controlar las lágrimas pero a él le gusta cuando le miro con ojos llorosos mientras le hago esa profunda mamada y me dedico en cuerpo y alma a complacerle. Me pide que le mire, que no deje de mirarle a los ojos como quien reza con devoción a su dios. Le sonrío y agradezco con mis ojos que sea tan generoso conmigo, que me permita sentir el palpitar de su grueso capullo sobre mi lengua… hasta que estalla en lechazos embistiendo, gozando, respirando como sólo un macho Alpha sabe hacerlo, fecundando a chorros. Le miro y le doy a entender lo bien que me sabe y alimenta su semen. Cuando ya me lo he tragado todo, - como soy un puto esclavo goloso - le pido más, y él se deja vaciar hasta la última gota. A continuación sostengo sus huevos en mis manos y se los beso con delicadeza en señal de agradecimiento y amor.
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CORAZÓN DEL ÁRBOL
- ¿Pero quien le ha enseñado a comportarse de esa manera tan lasciva? Preguntó Uriel.
- Nadie - contestó Belver - es su propia naturaleza quien le conduce y orienta. Es sincero amor y admiración sin reservas ni condiciones lo que los omegas sienten por sus alfas. (Dirigiéndose a la meretriz que continuaba arrodillada ante ellos) Eh, tú ..puta, chúpanos la polla a mi hermano y a mí, pero introdúcete las dos vergas en la boca y empieza a tragar.
La muchacha lo intentó pero rápidamente desistió de su esfuerzo y a entrarle náuseas
- No puedo, Señor... me duelen los labios y las mandíbulas.
- Pero si apenas has engullido un poco de la punta de cada una!
- No puedo, Señor...
- "No puedo" dice... ¿has visto hermano? - exclamó Belver - ¿sabes por qué dicen que no pueden y les entran náuseas? porque sólo piensan en ellas mismas, en su propio placer,se sienten indignas si te chupan la polla, en cambio, quieren que les prestes la mayor atención posible, que estés pendiente en todo momento de ellas, que las "cortejes" con dulces palabras para calentarlas, que les "hagas el amor" cuando tú en realidad sólo necesitas desahogar tu furia, follar como un macho, un puto salvaje y correrte a lo bestia... un omega jamás te diría "no puedo" porque no piensa egoístamente en su placer sino sólo en cómo complacer y satisfacer a su macho al máximo. Sí, hermano, el verdadero placer de un omega como Unai está en entregarse a su alfa. Por eso rabio de envidia cuando le veo con la puta cabra, cuando observo el amor y admiración que siente por el fauno y la manera en cómo se entrega a él sin pedirle ni exigirle nada, dejándole en libertad sin afixiarle ni agobiarle con peticiones, celos y chantajes emocionales, porque como omega sabe lo importante que es la libertad para un hombre.
- Belver, estás obviando algo muy importante: ese fauno realmente quiere su chico. No hay más que verle para darte cuenta de sus sentimientos hacia el muchacho. No todos los hombres y mujeres son como tú los describes. Aunque el muchacho es realmente sensual y apetecible sexualmente, no lo discuto, a mí me despierta mucho amor y ternura.
- Pues ámale ¿qué o quien te lo impide? ya sé que tú eres lo opuesto a mí aunque seamos hermanos gemelos. Te has criado en la ciudad, tu educación ha sido refinada y exquisita, has ido a la universidad, has leído libros, sabes de poesía... reúnes todas las condiciones necesarias para enamorar a nuestra víctima.
- ¿A qué víctima te refieres?
- Joder, hermano... a Unai, hostias!
- Belver ¿tengo que repetírtelo de nuevo? Estoy felizmente casado y amo a Arwen, mi esposa. La amo con locura.
- Ya, pero su vientre no es fértil. ¿No te lo han dicho los médicos? es una linda y hermosa muchacha, no lo pongo en duda, pero no puede darte un hijo por mucho que ambos lo intentáseis. Tampoco tú puedes fecundar sin mi ayuda ¿lo sabes verdad? estamos .. (Belver iba a utilizar la palabra "condenados") estamos obligados a follar dos dos juntos y al mismo tiempo, tu polla unida a la mía en íntimo contacto, penetrar al mismo tiempo y simultanear la salida de nuestro esperma para que se mezclen en perfecta alquimia.. sólo asó lograremos fecundar un útero y hacer germinar nuestros gemelos. Así lo han dispuesto los dioses, y nuestra prole crecerá fuerte, hermosa y saludable con la potencia y realeza que proporciona un río que se alimenta de dos cauces, de dos sangres.
- Querrás decir más bien, de tres.. si utilizamos al muchacho.
- Exactamente! gracias hermano por la aclaración. Por fin entras en razón! Vamos, Uriel... mírale cómo sabe mover las caderas en círculo y mantener bien apretada la verga del puto cabra para darle el mayor placer posible. Mira esos ojos de deseo siempre sonriendo y pendiente de hacer gozar a su macho.... ¿no es un verdadero encanto?
Uriel no pudo evitar excitarse al contemplar a Unai y Rheiki gozando de aquella manera. El demonio de su hermano aprovechó para rematar la faena. "Aléjate de aquí, zorra, no sabes hacer bien tu trabajo. Coge el resto de las monedas y vete a atender a otro cliente" le espetó de malos modos a la pobre chica que no tardó en desaparecer de escena.
- ¿Estás tan caliente como yo, hermano? - Dijo Belver - Ahora piensa por un momento en nosotros dos disfrutando con ese muchacho. Sus suaves manecitas sobre nuestras vergas y chupándolas al mismo tiempo. Créeme, él si sabe cómo hacerlo, él sabe cómo tragárselas una a una hasta el fondo y al mismo tiempo. Un omega como Unai estaría siempre babeando de deseo por nuestras vergas. Han nacido para eso.
Belver desabrochó la camisa de su gemelo y le besó en el cuello. A continuación, se desnudaron por completo.
- Uriel, hermano de mi sangre, necesitamos a "otro cuerpo" para unir el tuyo y el mío. Es lo que realmente deseamos ¿no es cierto? fundirnos el uno con el otro, ser un hombre con dos corazones, dos cerebros y dos pollas hambrientas de un mismo útero. No podemos follar uno con el otro, no lo deseamos porque "somos iguales y del mismo rango", los dos somos machos alfas y ninguno desea penetrar al otro, pero sí podemos utilizar a un omega para ello.. ¿me comprendes?
Belver acercó sus labios a los de su hermano.
- ¿Te das cuenta cómo necesitamos ahora a "otra boca" para saciar este tremendo deseo que sentimos el uno por el otro? La boca de Unai para enredar nuestras lenguas y juntar nuestros labios en un mismo beso...Unai haría posible ese milagro. Cómo nos gustaría hundir nuestras lenguas en la boca de ese muchacho para que tú y yo volvamos a ser uno como en el útero de nuestra madre.
Por último, Belver tomó la verga de Uriel y la acercó a la suya. Con su mano derecha empezó a frotarlas conjuntamente... los dos glandes húmedos y gruesos resbalaban uno sobre el otro.
- Oh... Hermano - continuó susurrando Belver -do imagínate nuestras pollas entran en ese cálido agujero como si fuésemos uno solo: dos machos en uno solo, una polla con dos potentes chorros.. dime: ¿Te gusta lo que te propongo, Uriel?
- Sí, si, sííí... tráeme a ese muchacho. Me muero por follarlo ¡Tráemelo Belver, maldita sea!
- Shhhhhhhhh... tranquilo hermanito. Te prometo que saldremos a buscarlo y lo secuestraremos. Lo haremos nuestro, lo adiestraremos para nuestro placer y para darnos muchos hijos.
Uriel no tardó en correrse abundantemente en la mano de Belver que a los pocos segundos hizo lo propio. La unión de los espermas adquirió inmediatamente una fuerza y consistencia impresionantes.
